Representantes del Ayuntamiento de La Carolina han mantenido esta semana una reunión con técnicos de la delegación de Agricultura de la Junta de Andalucía para planificar las actuaciones que pueden adoptarse ante la plaga de picudo rojo que ha sido detectada en el municipio. El picudo rojo es un insecto de origen asiático que atenta a las palmeras, perforando los árboles hasta provocar que se marchiten. En la Península Ibérica no existen depredadores naturales para esta plaga, lo que hace muy complicado el control natural.

Inicialmente se han cortado algunos ejemplares que eran irrecuperables y se aplicará un tratamiento de choque a otras palmeras para frenar la propagación de la plaga. También se ha mantenido una reunión técnica porque, dadas las características de algunas especies de palmera, no se puede proceder a una tala indiscriminada. En esa reunión se ha decidido realizar un inventario, que ya está elaborando personal municipal, para conocer los daños causados hasta el momento y el número de árboles afectados.
En paralelo, se informará a los vecinos que en sus propiedades tengan árboles que puedan verse afectados, fundamentalmente palmeras o árboles de especies similares. El concejal de Servicios, José Carlos Puga, ha explicado que "la plaga lleva presente en el municipio más de un año sin que hasta ahora se hayan adoptado medidas, entre las que incluiremos la información detallada a los vecinos que puedan tener palmeras afectadas, así como aplicar las medidas técnicas para impedir que se propague".
En esa línea, el concejal ha señalado que se ha actuado con celeridad "gracias a la profesionalidad de los jardineros, que han comunicado la situación de las palmeras dañadas, han talado aquellas no tenían solución y están trabajando para impedir que aumenten las incidencias". También ha agradecido "la colaboración de algunos vecinos que han informado a los servicios municipales sobre los daños detectados en su propiedad para advertir de la presencia de la plaga".